LAS MANOS
"Tus manos son mi caricia
mis acordes cotidianos
te quiero porque tus manos
trabajan por la justicia."
Mario Benedetti
Vencidas por el derroche y la abundancia,
todavía colmadas de recodos tuyos,
de latidos, de dispares pulsos desorbitados,
las manos, tras la densa fragancia de un minuto preciso
descansan ociosas, separadas del cuerpo,
independientes colmenas de miel enamorada,
y todo cuanto respiran,
cuanto dicen en silencio,
lleva tu nombre, la seda de tu tacto,
como si un extraño experimento genético
las hubiera creado sólo útiles para el amor.
1 comentario
Maite Sánchez Romero -