DE PUERTAS ABIERTAS
a Isidro Juan
Voy rondando claridades que se enhebran en tus ojos.
Montículos de epidermis cual llanuras de lino
donde tejer la bravura del silencio y sus costados.
Se incinera la tarde en los nidos desiertos
de la golondrina aquella que regresa al destino
de los cántaros enamorados,
y todo cuanto halla la caricia y el beso
es la firme promesa que nos encuentra dormidos
al borde de las sábanas cubiertas de luna.
Voy naufragando entre sílabas y abrazos,
retomando edades de voluminosa conciencia
porque todo cuanto abarca tu memoria
tiene un sabor de dulces bienvenidas.
Aquí está la puerta abierta de futuras auroras,
ya sabes que voy perdiendo llaveros y miradas
entre este otoño pletórico de versos.
3 comentarios
Vicente -
Gracias
manuel rubiales -
Damián -
Que hermosura de cariño derramado.