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SUPERVIVENCIA EMOCIONAL

TODOS CON ERNESTO CARDENAL

TODOS CON ERNESTO CARDENAL

De muchos es conocida la valía literaria y humana del poeta nicaragüense Ernesto Cardenal; de su catadura moral, de su lucha por la justicia y esa enconada rebeldía que lo lleva a batirse en duelo, día a día, con la propia vida. Persona peligrosa, sin duda.

Pues bien, después de unos años de ser acusado de injurias a raíz de una carta que publicó en defensa propia y siendo absuelto, el gobierno de Daniel Ortega, no pudiendo detener la fuerza de la razón y la justicia, vuelve a acusarlo y condenarlo por ese mismo delito en contra del sistema judicial. Algo incomprensible para el raciocinio "humano" (si algo de humano queda en estos seres todopoderosos) ya que el "delito" (en el caso de que lo fuera) fue juzgado en su momento y, además, está prescrito. Pero ya sabemos que a estos gobiernos de grades miserias no se les puede pedir nada que no signifique satisfacer sus propios caprichosde ira incontrolada. Por lo tanto, un juez respaldado y auspiciado por el propio Ortega, ha condenado a Ernesto Cardenal.

Contra esta absurda, injusta e irracional sentencia se han sumado voces de todo el mundo, entre ellos se encuentran: José Saramago, Eduardo Galeano o Antonio Skarmeta.

Nosotros, desde la humildad de este hogar nuestro, también queremos unirnos a él. Sabemos que por encima de todos estos atropellos existe una justicia de verdad, aquella que habla de igualdades y tolerancias... al menos esa es nuestra esperanza.

Aquí van unos versos suyos.  Estamos contigo, maestro.

 Yo he repartido papeletas clandestinas,

gritando: ¡VIVA LA LIBERTAD! en plena calle

desafiando a los guardias armados.

Yo participé en la rebelión de abril:

pero palidezco cuando paso por tu casa

y tu sola mirada me hace temblar.

           ERNESTO CARDENAL, de "Epigramas"

6 comentarios

Smyle -

Por cierto, muchas gracias por el comentario que me dejaste :)

Smyle -

¿Por injurias? ¿es abierto el caso por una carta que mandó? Muy justo, sí, señor.

Yo apoyaré a aquel que defienda la libertad sin cohibir, así que, ánimo.
Esperemos que haya, de verdad, justicia.

manuel rubiales -

Pues si, conocía el asunto, es indignante pero la historia se repite, ningún poder quiere mentes disidentes pululando en sus cimientos. Estoy con Ernesto Cardenal y con todo aquel que levante la voz conra la insensatez y el abuso

Damián -

No conocía a Ernesto Cardenal pero me acercaré a su obra por recomendación tuya. Me uno a esta manifestación íntima de "supervivencia emocional" y te agradezco tus comprometidos artículos, Sacra.
Un beso enorme cargado de admiración

capitan garfio -

Si Begoña,a esta gente....esa,a la que cree tener el poder por la fuerza....solo,porque tienen un arma para intimidar...lo que más les duele,incomoda y repatea tanto...tanto...como para cambiarles la cara...esa cara que es un cumulo de expresiones entre,odio,rencor y estreñimiento,que se los reconcome por dentro...es,sobre todo,la palabra,la razon y la verdad.Un beso.

Bego -

Estamos contigo, Ernesto, y con todos los que hacen la guerra con la razón como arma, con la palabra como munición.