ESPERANDO
Aquí sigo esperando un tímido aliento
de tristeza combatida en la memoria.
Me pesa el corazón en las pestañas de la esperanza
y voy hilvanando lunas
en el íntimo atardecer de la cordura.
Me pienso en la espera de los ocasos
y soy, profana y profunda,
el enigma inmisericorde de las febriles madreperlas.
Me escapo de mismos silencios
por no retomar el recuerdo, la caricia, el olvido,
por no regresarme a los fructíferos ataudes
donde una voz, de incierto descanso, nos invita al final.
4 comentarios
Damián -
Me encantaron tus lunas hilvanadas en el íntimo atardecer la cordura.
Un super abrazo
Annabel -
Una belleza.
Maria Luz Lerzundy -
Vicente -
Esperando, siempre esperando al silencio feroz que te traiga poemas perfectos, como ESPERANDO.
Te deseo mucho amor y silencios compartidos.