ME QUEDO CON...
A mi hija ALMA
Me quedo con tus ojos aquí:
a la intemperie de la vida,
arropando la añoranza de este corazón
que se vuelve anciano de repente,
que se anuncia con la premura caústica del olvido.
Tus ojos que enarbolan extrañezas azules,
sorprendentes maromas, como úteros indefinidos,
que se agitan, gozosos, al calor de mis párpados
anegados de lágrimas y recuerdos imprecisos.
Me quedo con tus ojos de aliento inmaculado,
con la miel que supura tu ígnea esperanza,
con esta plenitud de océanos que me envuelve
en oleadas de cárnica premura.
Te amo más allá de lo que conocen mis neuronas,
de lo que olvidan los espamos de la memoria,
de lo que recorren las arterias que incuban
los latidos precisos del oxígeno peregrino.
Por eso me quedo con tus ojos aquí,
ellos son la fuente de mi vida... la luz de mi futuro.
6 comentarios
Rosa -
Es bonito sentir la certeza de que un ángel se cruza de vez en cuando en mi camino, me mira, me sonrie y me da el abrazo mas sincero que pueda sentirse.
Gracias
Leti -
Clarisa -
Annabel -
Un abrazo. Un placer leerte.
Bego -
Os quiero a las dos.
manuel rubiales -