RENACER
Abrir las ventanas y respirar.
Dejar atrás la gélida torpeza del desencuentro
y reafirmar el oxígeno que nos voltea
como campanas que anuncian luz de esperanza.
Renacer,
rescatar,
reinventar.
El corazón, inflado de futuro,
se deja guiar por el lírico abrazo
de los encuentros que son, siempre,
motivos de añoranza ajada.
(Nada hay mejor como retornar al nido donde se nos recuerda
con el exacto apellido de nuestros huesos.)
3 comentarios
Anita -
Decía que iba a citar la parte de el corazón inflado de futuro, pero la verdad es que todo el poema espina alguna partecita de mi alma, así que me quedo con todo. Una obra hermosa Sacra.
Un gustazo andar por acá.
Besitos
Smyle -
Bueeno... A mí me gusta guardarme un día en el que apostar por el blanco o el negro. Quizás sea hoy.
Un besote.
Leti -