RETROCEDIENDO HACIA EL FUTURO
¿Verdad que a veces parece que el mundo retrocediese?... Un corazón deja de latir en el sótano, un bebé detiene su respiración sobre la cuna, el vendedor de embutido desdibuja su memoria y recorre calles de vuelta hacia el olvido o apalean a un perro por el simple placer de retomar la gruta de las cavernas y los alaridos. Es como si todavía no se hubiese inventado el fuego ni la palabra, como si la rueda fuera una quimera junto a la tolerancia y el abrazo, como si nada fuera más importante que la caótica caza del sueño y la arrogancia. Veo pasear políticos con voces algodonadas como vellocinos de oro que han sido coronados por la ignorancia consentida de la soledad trashumante de un pueblo demasiado dolorido como para pensar al sol. Veo erigir cadalsos tapizados de antesalas monárquicas donde la fe se desliza, entre reptiles y amarantos, entre pezuñas sinuosas con sabor a edénico pecado permitido. A veces parece que el mundo retrocediese hacia la primitiva barbarie de la desesperanza, hacia el inevitable pulmón de los pozos, hacia la primera sed molecular del vacío. A veces parece que el latido ya deja de tener sentido.
4 comentarios
Sacra -
Gracias por seguir traspasando el umbral. Un abrazo.
Sacra -
manolo rubiales -
Vino y besos
noah -